Como cuidar tu pañuelo de seda

 

Una de las preguntas que todas nos hacemos al principio en el mundo de la seda es ¿y como cuido yo ahora este pañuelo?, lo vemos tan delicado que nos da miedo la más mínima mancha sobre él. 

No os preocupéis, es cierto que la seda pueda parecer frágil pero es un tejido muy duradero siempre que se cuide adecuadamente y es mucho más sencillo de lo que crees. Pero vamos por partes:

Para guardarlas, los fulares o pañuelos en un cajón sin problema, para prendas mas grandes siempre puedes colgarlos en una percha de madera a ser posible y si es acolchada mejor que mejor..Si la seda va a estar guardada durante mucho tiempo, debe protegerse de la luz y los insectos. Se puede guardar enrollada en un tubo  con papel de seda  en un sitio seco y fresco, evitando usar bolsas de plástico ya que le impiden respirar.

Respecto al lavado, si se trata de una mancha concreta, echad un poco de jabón de lagarto diluido en la yema de los dedos y lo aplicáis suavemente en círculos para no deformar la fibras de la seda. El resto del pañuelo lo lavamos con jabón neutro y nunca debemos dejarlo en remojo. Esto último es muy importante.

Para secar la seda no se debe escurrir, ni retorcer, ni usar secadora. Un buen método para secarla es escurrirla entre dos toallas, dejándola secar al aire horizontalmente. Nunca los colguéis con pinzas, porque las fibras se deformarían de modo irreversible ni lo hagais en el exterior para que se seque al sol. Los rayos ultravioletas queman todo tipo de color.

Para el planchado, usaremos una temperatura adecuada es decir más bien baja, usando un trapo entre la plancha y la seda y del revés para evitar posibles accidentes. Se recomienda plancharla húmeda y sin vapor, ya que así no quedarán marcas de arrugas ni deformaremos la seda.

Como veis no es tan complicado y os aseguro que siguiendo estos pequeños consejos vuestros pañuelos os acompañaran durante muchos años.